Desde que cruzas las puertas de Casa Palacio Conde de Garcinarro sientes que has entrado en otro tiempo. Tiempos de damas reposadas en un hermoso jardín, tiempos de bellas historias, tiempos de silencios y de risas, tiempos sin tiempo…
El Palacio de los Condes de Garcinarro tiene una de las fachadas más afamadas de Huete, donde su sobriedad y elegancia se ven resaltadas gracias al flamante escudo que sostenta el dintel, perteneciente a José Antonio de Parada Vidaurre de Mendoza Flórez y Salcedo. Al acceder al distinguido edificio nos recibe su pintoresco zaguán que nos deja intuir sus antiguas caballerizas, actualmente convertido en comedor, y su antigua bodega, donde ahora pueden disfrutarse los vinos de esta tierra. Continuamos adentrándonos y accedemos a su patio porticado, que nos acoge en un espacio que da acceso a las nobles estancias. Nobles, si, pues entre personajes ilustres, en 1604 estuvo alojado su majestad el rey Felipe III.
El alojamiento cuenta con 14 habitaciones, biblioteca, salón de TV y un jardín cuyo huerto nos surte de los riquísimos tomates que se degustan en la casa. Además, cuenta con un amplísimo salón con chimenea donde disfrutar de una distendida conversación, una copa o echar una partida de ajedrez. En Casa Palacio Conde de Garcinarro podrá disfrutar de una estancia única.
