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Huete
GPS: 40.144517, -2.691666

 

Huete contaba con tres recintos defensivos, el castillo, la alcazaba (que comprendía toda la cumbre del cerro) y la muralla urbana. Desde el siglo XIII la ciudad creció y rebasó las murallas, quedando muchos de sus paños ocultos entre las casas. La muralla que acoge el casco antiguo de Huete pertenece a varios períodos cronológicos medievales, tanto del andalusí (siglos VIII-XII) como del castellano (siglos XII-XV). Su construcción se inicia en el periodo emiral, pero los restos más importantes corresponden al siglo X, en tiempos de Al-Mutarrif, señor de Wabda (Huete), que realiza importantes obras de fortificación. Seguramente a este periodo corresponde el tramo norte, donde hoy todavía se puede ver un espectacular lienzo construido en tapial y con torreones cuadrados. Los restos de los tramos oeste y sur, construidos en cal y canto, son de época cristiana. La puerta de Medina es la única medieval que se ha conservado del recinto murado. Tiene forma acodada, lo que indica que el acceso a este punto de la ciudad se realizaba de forma lateral. Probablemente fuese construida a finales del siglo XII. Adosada a esta puerta estuvo la parroquia de San Nicolás de Medina, hasta el año 1770, cuando, por Orden de Carlos III, fue trasladada a la iglesia de los jesuitas, expulsados de España en 1767. En ella estuvo una de las primeras imprentas de España, y se editaron, entre otras obras, las Ordenanzas Reales de Castilla de Alonso Díaz de Montalvo. Destacado es el soterramiento de parte de la calle de ronda bajo la iglesia de San Pedro y en el contiguo callejón del Moro, con estructura arquitectónica tradicional que le otorga gran valor urbano.